domingo, 4 de junio de 2023

09.- 04.06.2023. Trinidad. Ciclo A

 En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.


En el nombre de la fuente, del camino y de la energía.


En el nombre de la bendición, de la libertad y de la confianza.


En el nombre del fundamento, de la sensibilidad y del impulso.


En el nombre de la vida, de la pasión y de la intensidad.


En el nombre de la unidad de las unidades, 

del vínculo de los vínculos

y de la diversidad de las diversidades.


En el nombre del silencio, de la música y de la armonía.


En el nombre de la acogida, de la entrega y de la gracia.


En el nombre del amor, de la misericordia y la comunión.


En el nombre de la plenitud, del vaciamiento y del silencio vibrante.


En el nombre del encuentro, de la hospitalidad y de la fiesta.


En el nombre de la santidad de las santidades, 

de la humanidad de la humanidad

y del amor del amor.


En el nombre de la inclusión, de la diferencia y de la diversidad.


En el nombre de la presencia, de la palabra y del corazón.


En el nombre de la libertad, la alegría y el juego.


En el nombre del misterio cercano, 

del cuidado constante

y del ímpetu inagotable.


En el nombre del bien, de la verdad y de la belleza.


En el nombre de la creatividad, de la intuición y de la inspiración.


En el nombre del poder de lo real, 

de la intensidad de lo real

y de la densidad de lo real.


En el nombre del cimiento, de la luz y de la utopía.


En el nombre de la ternura, de la fraternidad y de la conspiración.


En el nombre de la santidad, de los seres humanos y del misterio.


En el nombre de lo uno, de lo tangible y de la multiplicidad. 


En el nombre de lo realmente real, de la presencia y del devenir.


En el nombre del mar, de la tierra y del viento.


En el nombre de la consistencia, de la insistencia y de la genialidad.


En el nombre de la madre, la benevolencia y la fraternidad.


En el nombre del amor sobre todo amor, 

de las entrañas de misericordia 

y de la fecundidad insondable.


En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.


Trinidad Santa.

Luz.

Luz de luz.

Luz de las luces de la realidad.

Luz que nos busca.

Luz que nos sustenta.

Luz que nos crea y recrea y plenifica.


Santa Trinidad.

Alabanza.

Adoración.

Silencio.


Trinidad Santa.

Amén.

Amén.

Amén.



Santa Trinidad.

Aleluya.

Aleluya.

Aleluya.



domingo, 28 de mayo de 2023

08.- 28.05.2023. Pentecostés. Ciclo A

 ¡Ven, Espíritu divino!

Ven sobre nuestras seguridades.

Emerge desde lo mejor de nuestro corazón.

Sé la luz de nuestras luces.


¡Ven, Espíritu divino!

Ven sobre el polvo de los siglos que nos recubre.

Emerge desde nuestras mejores raíces.

Sé la savia que nutre nuestros mejores frutos.


¡Ven, Espíritu divino!

Ven sobre nuestros lenguajes,

sobre nuestros ritos,

sobre nuestra manera de organizarnos

como grupos,

como parroquias,

como Iglesia.

Emerge desde lo mejor de nuestra humanidad.

Sé el viento que nos lleva más allá…

que nos lleva a la aventura fascinante

de sembrar el evangelio

de pensamiento,

de palabra

y de obra.


¡Ven, Espíritu divino!

Ven sobre nuestra sensibilidad.

Emerge desde nuestras capacidades de comunión.

Sé el caldo de cultivo de nuestros de paz,

de nuestros deseos de fraternidad,

de nuestros deseos de santidad.


¡Ven, Espíritu divino!

ven sobre nuestros miedos,

ven sobre nuestras mejores capacidades,

ven sobre nuestra esperanza

de una iglesia mejor,

una cultura mejor,

una Iglesia más evangélica.

Emerge desde las energías que hay en nosotros,

infundidas por Ti,

mantenidas por Ti,

impulsadas por Ti.


¡Ven, Espíritu divino!

Ven sobre nuestra inteligencia.

Emerge desde nuestras búsquedas.


¡Ven, Espíritu divino!

ven sobre nuestras fidelidades,

ven sobre nuestros desafíos,

ven sobre nuestras audacias.


¡Ven, Espíritu divino!

Reconstitúyenos.

¡Ven, Espíritu divino!

Posibilítanos.

¡Ven, Espíritu divino!

Aliéntanos.


¡Ven, Espíritu divino!

Haznos más cristianos. 

Haznos más humanos.

Haznos más santos. 


Carmelo Ampelio


domingo, 21 de mayo de 2023

07.21.05.2023. Domingo 7 de Pascua. Ascensión

 Señor Jesús, ¿qué has visto en nosotros para que nos llames a colaborar en tu misión?


Somos demasiado normales,

demasiado hijos de nuestro tiempo:

las flaquezas se transparentan en nuestros rostros,

a diario nos sentimos bloqueados por nuestras limitaciones y nuestros miedos.

Somos medianillos que chapoteamos como podemos en nuestra vida. 


Señor Jesús, ¿Cómo darte las gracias por llamarnos?

Es la mejor noticia que hemos tenido en nuestra vida.

Sabemos que tu presencia es lo que hace que podamos ser significantes en la vida de los demás. 

¡Qué inmenso regalo el sentirnos colaboradores de las fuerzas de salvación

que dan esperanza en este maltrecho mundo!


Señor Jesús, que no nos olvidemos que eres 

lo más íntimo de nuestro corazón, 

lo más fuerte de nuestras fuerzas, 

la fortaleza de nuestra más íntima convicción.


Si fuéramos monjes, diríamos que Tú eres nuestro monasterio.

Pero somos cristianos en medio de las turbulencias de nuestro tiempo.

Llena de tu amor los detalles de nuestra normalidad cotidiana.

Llena de amor todas y cada una de las relaciones con las que transcurren nuestros días.

Llena de amor todas las palabras que pronunciemos:

que salgan de un corazón sanado por Ti.


Señor Jesús: sabemos que Tú eres la vida de nuestra vida, 

la palabra de nuestra palabra, 

el testimonio de nuestro testimonio. 


Queremos seguir contigo.

¿A quién acudir si no es a Ti?


Señor Jesús: Impúlsanos aún más.

Que seamos más compasivos,

que seamos más fraternales,

que seamos más solidarios.


Señor Jesús: 

que no tengamos miedo a sembrar y a proponer lo que realmente hace falta: 

austeridad inteligente en la construcción de nuestros hogares y nuestras asociaciones,

sobriedad compartida en todos nuestros proyectos,

inteligencia compasiva en todas nuestras acciones. 


Señor Jesús: que no nos alejemos del corazón del mundo

que deseamos que sea nuestro corazón,

un corazón habitado por Ti,

Salvador del mundo. 


Señor Jesús: Somos hombres y mujeres de este mundo, 

camino de la salvación,

misteriosa,

total,

vital

que has iniciado

en toda la realidad,

en todas las criaturas,

en todo lo que alienta vida.

Amén.


Carmelo Ampelio.


domingo, 14 de mayo de 2023

06.- 14.05.2023. Domingo 6 de Pascua. Ciclo A

¡Ven Espíritu Divino!


Sin ti, Espíritu, como sonámbulos, entre ruinas… llenos de miedo avanzamos sin rumbo. 


¡Ven Espíritu Divino!


Sin ti, Espíritu, vivimos entre las feas energías ciegas de la materia, de la biología, de la cultura.


¡Ven Espíritu Divino!


Sin ti, Espíritu, vivimos ávidos, sedientos, sin paz, dominados por nuestras sombras.


¡Ven Espíritu Divino!


Sin ti, Espíritu, parece que nos definen nuestras vergüenzas, nuestros rencores, nuestra soberbia


¡Ven Espíritu Divino!


Sin ti, Espíritu, sólo irradiamos nuestras mediocridades, nuestros vacíos, nuestra triste fachada.


¡Ven Espíritu Divino!


Sin ti, Espíritu, somos poco más que egos que se golpean en una lucha de todos contra todos.


¡Ven Espíritu Divino!


Sin ti, Espíritu, creemos muchas sandeces, hacemos muchas tontadas, proponemos muchas tonterías.


¡Ven Espíritu Divino!


Sin ti, Espíritu, somos mundo, somos luchas de poder, somos grotescos personajes de extrañas conductas.


¡Ven Espíritu Divino!


Ven, multiplica nuestra capacidad de santidad.

Ven, fomenta lo mejor de nuestra humanidad.

Ven, haznos más auténticamente testigos del reino que avanza en la historia de toda la humanidad.


¡Ven Espíritu Divino!


Santifícanos. Cristifícanos. Entusiásmanos.


Carmelo Ampelio. 


domingo, 7 de mayo de 2023

05.- 07.05.2023. Domingo 5 de Pascua. Ciclo A


Cristo Jesús, 

camino, verdad y vida.


Contigo, Cristo Jesús,

vemos luz en estos tiempos de angustia.


Contigo, Cristo Jesús,

tenemos esperanza a pesar de los pesares,

a pesar de los desconciertos,

a pesar de las manipulaciones,

a pesar de los ruidos entre las que nos movemos.


Contigo, Cristo Jesús,

sabemos de verdad quienes somos,

somos hijos el Padre,

somos espíritu en el Espíritu,

somos hermanos contigo.


Cristo Jesús, 

sostienes la médula de nuestra realidad,

sostienes la esencia de nuestra humanidad,

sostienes el latir de nuestra humanidad.


Cristo Jesús,

fraternidad de la fraternidad,

que nos llamas y capacitas

para colaborar con los mejores

en el cuidado de toda vida.


Cristo Jesús,

alegría de las alegrías,

que nos alientas a vivir a fondo la vida

que nos infundes la fuerza de la vida nueva,

que nos acompañas en nuestro crecimiento espiritual.


Cristo Jesús

energía de las mejores energías,

danos valentía frente a los retos,

danos inteligencia ante las ambigüedades,

danos confianza en los momentos de sufrimiento.


Cristo Jesús,

alborada,

asombro,

autenticidad.


Cristo Jesús,

bienaventuranza,

llamada,

resurrección.


Cristo Jesús,

Agua de Vida,

Pan de Vida,

Presencia de Vida.


Cristo Jesús, 

salvación,

santidad,

vida por los siglos de los siglos.


Amén,

Aleluya.

Aleluya.

Aleluya.


domingo, 30 de abril de 2023

04.- 30.04.2023. Domingo 4 de Pascua. Ciclo A

Señor Jesús, estos tiempos extraños nos zarandean una y otra vez:

la desconfianza nos angustia.

Tenemos miedo…

un miedo difuso,

gris,

enfermizo.


Señor Jesús, ¿de verdad nos abres las puertas de la esperanza?

No nos bastan las palabras que no usamos cotidianamente,

no nos bastan enunciados que pierden su capacidad de transformarnos en mejores humanos y cristianos,

no nos bastan ritos que quedan muy lejos de nuestra sensibilidad y nuestras mejores capacidades.


Señor Jesús, ¿quién y cómo nos va a sustentar entre tanto y tanto escombro?

Ya no nos vale el ir tirando como sea,

espiritualmente

personalmente,

socialmente.


Señor Jesús, vivimos tiempos espasmódicos:

no hay fuentes realistas que nos den alegría de vivir.


¿Señor Jesús, ¿cómo sabremos que nos abres las puertas de la vida nueva?

Es como si sobreviviéramos a diario,

como si la prisa y la avidez nos devoraran,

como si nos hubiéramos olvidado del silencio contemplativo,

de tu presencia en nosotros y en lo que nos pasa.


Señor Jesús, ¿cómo crecer en la mirada contemplativa y misericordiosa ante la vida que vivimos?


Señor Jesús, la rabia nos corroe muchas veces…

como una especie de herpes en nuestro espíritu.

El ego, con sus zarpazos, nos vence, nos desborda, nos aprisiona

y nos creemos las frustraciones que provoca.


Señor Jesús, ¿cuándo sabremos abrir de verdad la puerta a la confianza de fondo que nos ofreces?


Nuestra soberbia nos hace mimetizarnos en esta especie de jungla donde nos movemos…

nos mostramos humanos demasiado humanos entre humanos demasiado humanos.


Señor Jesús, conviértenos en sembradores de ternura y la fraternidad.


Señor Jesús, ayúdanos a crear nuevas relaciones personales y sociales

más allá de lo que supone que hace la gente de bien… 

inspíranos en la creación de nuevos vínculos más gratificantes,

más allá de lo que la presión social nos dice que es lo socialmente aceptable…

alúmbranos como seres humanos humildes 

pero consistentes,

auténticos,

fiables…

en las palabras cotidianas,

en las acciones diarias,

en las presencias donde colaboramos

en la construcción de ese mundo mejor

que anhelamos,

intuimos,

deseamos…


Señor Jesús, 

amor sobre todo amor,

ayúdanos a afrontar

tanto y tanto desafío

que la vida, tan humana,

nos pone por delante…


Amén. Aleluya. Aleluya. Aleluya.

carmeloampelio@gmail.com

domingo, 23 de abril de 2023

03.- 23.04.2023. Domingo 3 de Pascua. Ciclo A

03.- 23.04.2023. Domingo 3 de Pascua. Ciclo A

Cristo Jesús, alma de la esperanza ante las maldades de la vida, reafírmanos con tu presencia.

Cristo Jesús, ancla en los desasosiegos inesperados, ratifica nuestra fe todos los días con tu palabra.

Cristo Jesús, céntranos en los revolcones de la vida, porque muchas veces perdemos la cabeza.

Cristo Jesús, fundamento de nuestra fe, refuerza nuestras certezas con tu fascinante enseñanza.

Cristo Jesús, disipa las tinieblas de nuestras entrañas… muchas veces nos domina el desconcierto y el autoengaño.

Cristo Jesús, estrella polar de los mapas de la vida, oriéntanos con tu santa sabiduría.

Cristo Jesús, acláranos lo que realmente es esencial… tantas y tantas veces huimos de los esencial discutiendo por fantasmagorías de nuestra imaginación.

Cristo Jesús, increíble irrupción de la vida que nos espera, ábrenos el corazón para que tu fuerza nos impulse todavía más, todavía más lejos, todavía más libres.

Cristo Jesús, raíz de donde anidan las respuestas a nuestros deseos más humanos, no dejes que nos apartemos del alimento diario de tu palabra.

Cristo Jesús, entraña de los humanos que buscan paz, apacigua nuestro corazón en los momentos donde nos desborda el resentimiento.

Cristo Jesús, fondo misterioso de toda comunión, infúndenos valentía para tender todos los puentes que hagan falta para que reine la paz y la fraternidad.

Cristo Jesús, manantial de lo mejor del ser humano, haznos inteligentes servidores de las necesidades de las personas que nos cruzamos en la vida.

Cristo Jesús, manifestación de lo que Dios es, hace y desea, haznos transparencia fecunda de tu santidad en nuestras palabras, en nuestras acciones, en nuestras presencias.

Cristo Jesús, médula de la vida, aliéntanos, que nos cansamos en estos extraños tiempos que nos agobian.

Cristo Jesús, núcleo de la comunión, empástanos, que nos craquelamos.

Cristo Jesús, presencia que recrea y enamora, únenos, que nos dispersamos ante tanta y tanta mentira que nos rodea y nos emborracha.

Cristo Jesús, secreto permanente de los corazones que tanto y tanto necesitan amar y ser amados. 

Cristo Jesús, fuente inagotable de sentido, significado y sensibilidad.

Cristo Jesús, fontana serena ante los abismos de las biografías demasiado humanas.

Cristo Jesús, sustento inefable de todo camino hacia Dios

Cristo Jesús, por ti sabemos que no estamos solos,

sabemos que no estamos sin defensa ante las pellejadas de este mundo

sabemos que no somos como una bolsa de plástico que arrastra el viento.

sabemos que no estamos arrojados en los basureros de la vida.

Cristo Jesús, alfaguara asombrosa de la fe para los que se acercan a tu presencia

Cristo Jesús, Señor de nuestras vidas.

Aleluya.

Aleluya.

Aleluya.

carmeloampelio@gmail.com


 

domingo, 16 de abril de 2023

02.- 16.04.2023. Domingo 2 de pascua. Ciclo A

Cristo Jesús, el nombre de nuestra paz.

Cristo Jesús, el cimiento de nuestra unión.

Cristo Jesús, la garantía de nuestra fraternidad.

Cristo Jesús, el origen de nuestro sosiego.

Cristo Jesús, la inagotable fuente de nuestra energía.

Cristo Jesús, la raíz de nuestra llamada a la autenticidad humana.

Cristo Jesús, la plenitud de nuestra libertad.

Cristo Jesús, el alimento de nuestra comunión.

Cristo Jesús, la clave de nuestra justicia.

Cristo Jesús, lo más íntimo de nuestro corazón.

Cristo Jesús, nuestra inagotable reconciliación con la vida.

Cristo Jesús, nuestra radical novedad en la verdad y el bien.

Cristo Jesús, inagotable origen de nuestra nueva humanidad.

Cristo Jesús, fascinante vencedor de nuestras resistencias.

Cristo Jesús, imparable vivificador de nuestras pasividades.

Cristo Jesús, santa purificación de nuestros egoísmos.

Cristo Jesús, pacificador amable de nuestras agresividades.

Cristo Jesús, liberador de nuestras más hondas vergüenzas.

Cristo Jesús, superador de nuestros atávicos miedos. 

Cristo Jesús, ancla que da serenidad de nuestra ira.

Cristo Jesús, clarificador de nuestras ambigüedades.

Cristo Jesús, poderoso redentor de nuestras culpas,

tan malignas, tan perversas, tan dañinas…


Cristo Jesús, Señor de nuestra vida.

Aleluya, aleluya. aleluya.

carmeloampelio@gmail.com


domingo, 9 de abril de 2023

01.- 09.04.2023. Domingo de Resurrección. Ciclo A

 01.- 09.04.2023. Domingo de Resurrección. Ciclo A


Cristo Jesús, Salvador.      

 

En mi fluctuar, tu sosiego.

En mis pérdidas, tu llamada.

En mis fracasos, tu esperanza.

 

En mi labilidad, tu fundamento.

En mis negligencias, tu conmiseración.

En mis tentaciones, tu aliento.

 

En mis culpas, tu mirada compasiva.

En mis miedos, tu compañía.

En mis medias mentiras, tu autenticidad.

 

En mis palabras vacías, tu poder.

En mis infantilidades, tu ternura.

En mis dolencias, tu bálsamo.

 

En mis aislamientos, tu resonancia.

En mis congojas, tu palpitar.

En mis miedos tan humanos, tu abrazo.

 

En mis pecados, tu perdón.

En mis desquiciamientos, tu serenidad.

En mis necedades, tu realismo.

 

En mis maledicencias, tu bienaventuranza.

En mi errar, tu luz.

En mis derivas, tu faro.

 

En mis desafinar, tu tono de la belleza.

En mis miserias, tu pureza.

En mi sed, tu agua.

 

Cristo, corazón humano fascinante

Cristo, corazón humano invencible.

Cristo, corazón humano

que es verdad sobre toda verdad.

 

Cristo, Tú, el bienaventurado.

Cristo, Tú, el que irradia bendición.

Cristo, Tú, el que genera comunión.

 

Cristo, radiante santidad inaudita.

Cristo, santa novedad inacabable.

Cristo, santidad de toda santidad.

 

Cristo, Señor resucitado,

¿A quién acudiremos?

Tú tienes palabra de vida eterna.

carmeloampelio@gmail.com